QUIEN NO CORRE VUELA

Reflexiones y paranoias de un Loco que no sabe de que huye pero prefiere correr que estarse quieto mientras ve la vida pasar

viernes, 24 de diciembre de 2010

Mis viejas amigas

 Hoy toco madrugar, bueno que novedad, carrera = madrugar, pues esta vez no, porque hasta ayer a las ocho de la tarde estaba convencido de que la carrera de noche buena que se celebraba hoy era por la tarde.

Menos mal que me avisaron, porque ya me veía a las cinco de la tarde vestido con toda la equipación en medio de las Mestas con cara de tonto esperando a toda la gente.

Ya con tanta carreras, que si San silvestres, quedadas..., se hace uno un lio.
Bueno, que al final madrugue y llegue a tiempo para correr.

Objetivo a priori, a igual que en Castrillón, salir tranquilamente, a un ritmo moderado, que no me molestara las piernas aun en periodo de recuperación y divertirme, eso sí, algo me paso por la cabeza.



No se porqué esta mañana paso por mi mente que la culpa de todas mis malas actuaciones , mas que malas por resultados, malas por como terminaba fisicamente, eran mis nuevas Nike, adquiridas justamente despues de la media maratón de Langreo, donde a partir de ahi, me surgieron muchas dificultades fisicas.

Los cinco pares de zapatillas usados este año



Más que por las propias zapatillas, fue superstición, pues evidentemente unas zapatillas no hicieron que me costipara o que estuviera con un virus en el estomago varios días.

Entonces me acordé que en mi maletero, perdido entre toda las cajas y bolsas tenia mis olvidadas Asics GT con las que tantas buenas carreras había corrido este verano.

 

Con todo preparado, incluso con el dorsal puesto, me quite mis Nikes y me calcé mis viejas amigas.

Despues de casi dos meses sin usarlas, ni para entrenar si quiera.

Pues llamarlo placebo, o lo que queráis, pero hoy volví a sentir la chispa.
Esa que llevaba semanas buscando, el poder correr por debajo de 4min el km pudiendo hablar  y mantener el ritmo algún tiempo considerable.

Lo conseguí, sigo sin verme tan rápido como antes, pero me veo capaz de volver, y de mejorar, cada vez con menos molestias, y con esa sensación de terminar y ser capaz de correr otros 5 kilómetros más.

Este para mi a sido uno de los mejores regalos que podía tener para navidad.


Asi que ya será por supersticiones, manías, o lo que sea, vuelvo a mis gastadas Asics para esta San Silvestre.

Respecto a la carrera me ha gustado mucho mas este nuevo recorrido.

Menos curvas cerradas, más posibilidades de ir rápido, y como no, un delicioso papa noel esperandonos en la meta.

Ahora a descansar que esta noche es larga.
No os paséis con los brindis y aunque no me gusten nada estas fechas... FELIZ NAVIDAD....

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